Con los pies en la Tierra
Por Rachel Corcoran.
Abril 14, 2013.
Para millones de
fanáticos, Gillian Anderson, siempre será la investigadora de extraterrestres
Dana Scully. Pero en estos días, la ex protagonista de 'The X-Files' es una mamá
pendiente de los horarios de la escuela y se está uniendo a las filas de
detectives terrestres de la televisión.
Saquemos la verdad
ahí afuera: Gillian Anderson nunca se ha visto mejor. Vestida toda de negro, en
jeans ajustados y un jersey de cuello alto, con el cabello recogido hacia atrás
en una cola de caballo que hace alarde de su piel perfecta y esos famosos
pómulos. Nunca creerían que tenga 44 años.
Está relajada, además, e
instantáneamente conversadora, sin ningún rastro de la persona "irritable y
seria" que en el pasado se ha clamado que es. Cuando habla – en el acento
inglés que adopta en estas costas – es considerada y reflexiva, pero está muy consciente
de la hora y de los minutos que faltan antes de que deba retirarse para recoger
a sus dos hijos pequeños de la escuela.
Aunque Gillian Anderson
siempre estará asociada con The X-Files, la serie dramática sobre lo paranormal que se desarrolló
desde 1993 hasta 2002, y generó dos secuelas fílmicas, el papel que estamos
discutiendo durante un café es DSI Stella Gibson en el nuevo drama de BBC2, The
Fall. Gillian reconoce que su personaje, quien es llamada para asistir con la
investigación de una serie de asesinatos en Belfast, es uno de sus papeles
favoritos hasta la fecha. Viniendo de los labios de la agente Dana Scully, esa
es una gran declaración.
"Stella se me abalanzó al
instante", explica la actriz, que vive en Londres con sus hijos, Oscar de seis y Felix de cuatro. "A menudo, cuando un personaje puede hacer eso, el resto del
guión no está a la altura, pero los guiones de Allan Cubitt son muy convincentes."
“Me encanta la forma
indefinida de Stella. Incluso en el final de esos cinco episodios, no sabes en
realidad quién es ella o cuál es su historia. Ella no revela nada. Es muy
independiente, pero es una mujer en un mundo de hombres. En esa situación puedes
seguir uno de dos caminos – o consigues lo que quieres utilizando tu feminidad, o aprendes
a ser severa y a exigir el respeto que mereces basado en tu experiencia. Stella
es más lo segundo."
Gillian es bien conocida
por interpretar personajes fuertes – su incursión en adaptaciones de Dickens
para la televisión comprende de una aterradora Miss Havisham en Great
Expectations y una temible Lady Dedlock en Bleak House – pero no se debe a que
ella los busque.
"Fuerte es
para lo que me escogen, así que no es necesariamente por elección",
explica. "Muchos de los de personajes
que he interpretado pudieron ser de personalidades fuertes, pero también tenían
debilidades igualmente grandes. No me ofrecen seguido el tipo de papeles en que las vulnerabilidades se llevan en la manga, por lo que me encantaría que
alguien me enviara algo donde pueda ser una boba. Incluso algo bufonesco sería
bienvenido."
De hecho, considerará
cualquier trabajo siempre y cuando no signifique estar largos periodos de
tiempo lejos de sus hijos.
"Generalmente, cuando me
ofrecen algún papel, mi primera pregunta, incluso antes de ver el guión, es
¿cuáles son las fechas?", sonríe. "Si en verdad me interesa algo y quiero ir tras de ello, entonces dejo el calendario por fuera. Con The Fall, que fue rodada en Irlanda del Norte, dije que podía hacerlo
si se me permitía regresar los fines de semana y me dieron una semana libre por
medio plazo a mediados de la filmación."
"He sido afortunada de
que hasta el momento la mayoría de los proyectos que he optado por hacer hayan
sido de muy corta duración – he escogido numerosos papeles pequeños que son los
que mejor se ajustan a mis horarios y los niños. Tengo una niñera,
pero nunca he estado lejos de ellos por más de dos semanas."
Hasta ahora, claro. "Por
primera vez estoy por ausentarme por dos semanas y media para filmar Hannibal
(la tan publicitada nueva serie de NBC, donde Gillian interpreta a la
psiquiatra del notorio Dr. Lecter) Me estoy poniendo un poco nerviosa."
Así que, ¿no hay ninguna
oferta de trabajo que podría tentar a la señora Anderson a retocar el balance entre
su vida personal y profesional? "Si se tratara de una
gran película, tal vez, entonces empezaría a considerar sacarlos de la escuela
y conseguirles un tutor", sonríe. "Sí, por Scorsese podría ser factible!"
Como una aficionada
confesa del cine, la pasión de Gillian, indudablemente, reside en los filmes. Entonces,
¿cómo es que está aquí y no sumando ofertas en Los Angeles?
"Mi intención
original no era estar en el Reino Unido por tiempo completo", explica Gillian, quien creció entre
Chicago y Londres y siente una afiliación igualitaria con ambos países. "Compré una
casa en Londres cuando tenía 35 años y siempre asumí que sería un lugar temporal,
donde podría pasar un par de meses al año. Pero luego me enamoré cuando conocí
al que sería mi segundo esposo (el documentalista Julian Ozanne), y también me
enamoré de Londres. Ahora me da la sensación de que es el lugar indicado para
mí. Los niños están en la escuela, y agarrar y mudarme a Los Angeles para ir en
la búsqueda de cosas no se siente genuino."
Gillian se casó con
Ozanne en el año 2004, pero la pareja se separó dos años después. Luego se
involucró con el empresario Mark Griffiths, el padre de sus hijos, pero su
relación terminó el año pasado. Ella además tiene una hija de 18 años, Piper,
producto de su primer matrimonio – con uno de los miembros del equipo de The
X-Files – que terminó en 1997. Actualmente soltera, reconoce que la maternidad
es una experiencia muy diferente en una segunda oportunidad.
"Mirando hacia atrás a
mis veintes, no creo haberme dado cuenta en ese momento de la importancia de
ese papel", admite. "Puedo decir que hice mi mejor esfuerzo y que luché duro
para pasar todo el tiempo posible con mi hija, incluso si eso significaba que
estuviera en los sets conmigo durante todo el día. Me siento muy bien acerca de
cuanta prioridad le di, a pesar de que era muy joven. Hay algo muy distinto en
ser una mamá mayor y tener esa experiencia de vida; se siente más preciado de
alguna forma. Se vuelve más y más importante pasar tiempo de calidad con tus
hijos. Además, mientras más aprendes sobre ti misma y el impacto que tus
propios padres tuvieron en ti, empiezas a tomar decisiones diferentes."
Gillian todavía se
asegura de organizar tiempo para Piper, a pesar de que está en un colegio internado. "Viene a casa los fines de semana y nos divertimos mucho juntas. Es un tipo diferente de responsabilidad el que se tiene con un adolescente, ya que
empiezan a convertirse en un amigo al mismo tiempo que son niños. Tienes que juzgar
los límites en torno al tipo de información que es apropiado compartir con
ellos – es un balance muy delicado con madres e hijas."
Piper no es el único
legado de los años de Gillian en The X-Files. La fama mundial que le trajo no
muestra signos de disminuir, con las nuevas generaciones descubriendo los
encantos de la serie de culto, y un sorprendente número de chicas admitiendo
tener un enamoramientos con la agente Scully.
"Todavía recibo cartas y
correos electrónicos de personas que son de mi edad o un poco más jóvenes
diciendo que están escribiendo porque solían ser fanáticos, o que tienen 12
años y que acaban de descubrir The X-Files", dice. "A menudo, las mujeres y las
niñas hablan de la fuerza que obtuvieron de Scully y sobre cómo la fortaleza que
mostró durante las cosas por las que atravesó, las ha ayudado a superar dificultades
en sus propias vidas. Es asombroso."
La actriz tiene buenas
razones para estar agradecida con Scully, y no sólo por haberla hecho famosa. "Cuando
me ofrecieron el papel para el piloto de The X-Files estaba en mi último cheque
de desempleo – estaba durmiendo en el sofá de alguien, literalmente."
"Era joven e ingenua y no
sabía en lo que me estaba metiendo. Por lo general me lanzaba en proyectos sin
detenerme un momento para evaluar la situación, o para preguntarme a mi misma si
en realidad era algo que quería hacer, pero si tuviera ese tiempo otra vez, no
elegiría de ninguna otra forma."
Gilian no parece tener
miedo de que los papeles se le agoten. En día en que nos encontramos recibió nada
menos que cuatro ofertas de trabajo, y ya hay en línea otra serie para The
Fall. Pero admite que ni siquiera sus facciones perfectas son inmunes a los
efectos del tiempo.
"Nunca solía
molestarme en pensar en el cabello, maquillaje y todas esas cosas, pero he
empezado a prestarle un poco más de atención y eso tiene que ser vanidad",
admite. "Ahora me importa un poco más cómo luzco de lo nunca antes lo había hecho, y eso tiene que ver con la edad. Pero en realidad no me esfuerzo demasiado
para mantenerme en forma. Practico las etapas del yoga un par de veces a la
semana y corro un poco."
"He trabajado con
entrenadores en distintos momentos de mi vida – pero lo que logra es
insignificante", añade. "Nunca voy a ser esa persona que se levanta todos los
días a las cinco de la mañana antes de que los niños se despierten para
ejercitarme por una hora. Soy demasiado perezosa. Si pensara que en realidad va
hacer alguna diferencia con el estado de mis muslos podría, pero no lo creo.
Los pedacitos por los que me preocupo no se pueden cambiar y sólo me
queda aceptarlos."
The Fall próximamente en
BBC2.
Artículo Original: Express.co.uk.
Scans gracias a: All About Gillian.
Traducción: EGA.
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